Maria DeArman
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Capitana

Maria DeArman

Médico de familia

La capitana Maria DeArman, una médica de familia de la Fuerza Aérea, explica por qué decidió traer sus habilidades a las Fuerzas Armadas y comparte cómo fue su movilización a Afganistán.

Servir en la Fuerza Aérea les da a los médicos como DeArman más tiempo para trabajar con pacientes y elimina los gastos generales que implica abrir un consultorio médico civil.

Médico de la Fuerza Aérea

Para aprender más sobre servir como médico en las Fuerzas Armadas, visite Medicine + the Military.

Vídeo publicado el 29 de julio de 2021

Tiempo 1:39 Ver Transcripción

Transcripción

Capitana Maria DeArman: Soy médica con una capacitación civil que incluyó una residencia médica,, y la mayoría de mis amigos se dedicaron directamente a la práctica civil. Quizás ganen más dinero. Quizás estén en la categoría de mayores ingresos, y, por lo tanto, pagan más impuestos. Quizás tengan que pagar más gastos generales. Quizás tengan que pagar personal. Quizás tengan que pagar el seguro. Por lo que ganan más. Pero creo que se quedan con menos. En cambio, yo no tengo gastos generales y tengo 30 días de vacaciones al año. Y realmente creo que es más divertido.

Participé en una movilización muy especial. Se denominan Equipos de reconstrucción provincial. Es un programa que ayuda a restablecer a las personas de Afganistán. Creamos rutas y ayudamos a construir y remodelar hospitales, y a establecer la atención médica. Mientras estuve allí, me ocupé de la salud de las mujeres. Enseñé todo lo relacionado con los partos, cómo ayudar a que nazca un bebé. Conocí a médicos afganos. Fue realmente una oportunidad increíble durante un año entero.

Ser médico es gratificante en sí. Para mí, ser médico de la Fuerza Aérea es una oportunidad para ayudar a las personas que realmente necesitan ayuda. Algunas veces, las personas en combate se aíslan y no se comunican con sus familias con la frecuencia que quisieran. Y las personas que quedan de este lado, sufren y se generan muchas emociones. Si uno no has sido movilizado, no creo que pueda comprender la gravedad de esto. Pero para aquellos que sí han sido movilizados, como que me gusta mirar a esos pacientes, y mirarlos a los ojos y ser ese puente de conexión, y eso es, para mí, lo más gratificante.